Crema de calabacín con un toque de queso


Otra de mis cremas favoritas. Fría en verano y calentita ahora en invierno. No puede ser más simple. Y aunque los quesitos no son, ni de lejos, mi tipo de queso favorito los empleo como un buen recurso para quitarme el "mono" ya que sigo una dieta baja en grasas. 

En Mallorca usamos una raza de calabacín que no he encontrado cuando he vivido en la península: el calabacín blanco. El sabor de la piel es mucho más suave que la del verde así que no lo pelo nunca, en cambio si alguna vez uso el verde suelo quitarle parte de la piel. 

Calabacines blanco y verde

Este calabacín blanco también es más "dulce" que el verde así que los diabéticos con mono de "dulce" también podéis usar esta crema como salsa para carnes o pescados. 


Ingredientes: 

(Para realizar una receta sin gluten debéis aseguraros que todos los ingredientes son aptos para celíacos dado que hay ingredientes libres de gluten que pueden llevar trazas de alimentos que sí lo contengan.)

450 gr aproximadamente de cebolla y/o puerro 
1200 gr. aproximadamente de calabacines blancos medianos sin pelar (semipelados si son verdes)
30 gr. de aceite de oliva virgen extra
200 gr. de agua
8 quesitos light (opcional, no usar para la versión vegana)


Procedimiento en Thermomix:

  1. Colocamos la cebolla y el puerro cortado en trozos en el vaso y troceamos 3 segundos a velocidad 4 . Añadimos el aceite y programamos 10 minutos, 120º, vel 1. 
  2. Añadimos los calabacines a dados, el agua y programamos 30 minutos, 120º, vel 1.
  3. Añadimos los quesitos y trituramos durante 1 minuto a velocidad 7 hasta 10. 

Procedimiento tradicional:

  1. Trocear la cebolla y el puerro en juliana. Pochar en una cazuela hasta que esté bien blanda. 
  2. Añadir el calabacín y el agua y dejar hervir a fuego suave hasta que esté todo bien cocido. 
  3. Añadir los quesitos y triturar hasta conseguir una textura emulsionada. 

¡Espero que os guste!





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